DOLOR

"QUIEN SABE DE DOLOR, TODO LO SABE" (Dante)
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.. y si hay alguien que sabe de dolor es un ciclista. Hoy , en la jornada de descanso del Tour , la palabra del día es sin duda dolor en su doble vertiente: la física y la que es peor aún, la moral.
Física en un buen puñado de corredores ( Porte, Thomas, Mori, Herrada....) y porque si lees los partes médicos te encuentras con fractura de cadera, de clavícula, neumotorax, conmoción cerebral.... Dolor por supuesto y cicatrices que estarán ya siempre en esos maltrechos cuerpos.
Pero nada comparado con el dolor moral. El que sintió Valverde cuando en el mejor año de su vida se fue directo al hospital en las primeras pedaladas, el que siente Porte cuando todo el mundo le señalaba como gran alternativa, .... Podrán resarcirse, podrán levantarse tras haber caído, podrán ser incluso mejores que antes, pero esta oportunidad ("su" oportunidad ) , la cual habían buscado con ahínco con un sinfín de sacrificios que solo ellos y su familia conocerán, ya ha pasado.
Pero hay algo infinitamente peor. Y es no volver a tener ninguna oportunidad más. El haber luchado sin descanso, el haber sacado lo mejor que había en tí mostrando ante el mundo una fortaleza que a todos maravilló. Me refiero por supuesto a Adriano Malori, el corredor del Movistar que hoy, en rueda de prensa ha anunciado su retirada del ciclismo. Malori se cayó en el Tour de San Luis de 2016 sufriendo un grave traumatismo cranoencefálico. Se temió por su vida pero no solo sobrevivió sino que ofreció un ejemplo que debería mostrarse en cualquier centro educativo. HOras y horas de rehabilitación, de llevarle la contraria a médicos y fisios haciendo posible lo imposible, ... y que lo llevó incluso a volver a ponerse un dorsal. ... para caerse de nuevo, para volver a la pesadilla.
Malori ha querido dar por concluida ésta . "lo he intentado, pero los resultados están ahí". "Sí, montar en bici sí puedo, ... pero competir no". Muy duro para alguien que lo lleva haciendo desde niño. Muy duro para quien ha sido subcampeón del mundo o tres veces campeón nacional.
Pero como siempre un ciclista, ese ser que muchos demonizan y que sin embargo personifica una serie de valores supremos , deja una puerta abierta a la esperanza para muchos: " Y eso es lo bueno, me he recuperado como nadie. Este caso puede ser un mensaje de esperanza para otros, aunque no haya podido volver a ser corredor"
El dolor de Malori hoy seguro que es más desgarrador que las heridas sufridas en una carretera de Argentina y más que las que pueden padece hoy varios corredores del Tour. Imposible al menos por mi parte olvidarlo.
Dante decía que "quien sabe de dolor , todo lo sabe". Por eso un ciclista es alguien que merece un respeto que no siempre se le tiene.